Afortunadamente, una serie de coincidencias me la recuperaron en estos días, y bueno, a escucharlos y disfrutar su frescura y virtuosismo.
No quiero hacer historia aquí, sino solamente compartir algunos de los momentos más estupendos de esta banda británica, quienes tal vez no lograron la trascendencia de algunos de sus contemporáneos, pero definitivamente no quedan rezagados en creatividad y talento. Y ni que hablar de la voz perfecta de Annie Haslam, de una dulzura y expresividad indescriptibles.
A disfrutar se ha dicho:
Y claro: Wetton también tocó con ellos...
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