Así que allí fuimos, expectantes, y la propuesta no defraudó: buenos arreglos, una base poderosa -Torres padre e hijo, Nabil, Coco- y mucha energía arriba y abajo del escenario redondearon una noche llena de música y emoción que quedará por largo tiempo en nuestro recuerdo.
Aquí, un mosaico de momentos de esa noche.
El maestro de ceremonias se lució: el actor Juan Carlos Abdo con su oficio y buen humor fue el hilo conductor de una noche intensa.
Un arranque explosivo, de enorme técnica: Andrés Ludmer y Gustavo Marozzi.
Uno de los picos de la noche: Marcelo y Pablo López, y su set preciso y emotivo.
Pablo Palumbo y Raúl Giovanoli desgranando bellas melodías.
Palumbo y Carlos Balbi, con sonidos funk.
Balbi, Roger Muzzio y Valdi Mónaco.
La exquisitez en acción: Ariel Pozzo y Luis Fuster dando rienda suelta a las sutilezas.
Otro momento exquisito: Palmo Addario y Luis Fuster.
Final a todo trapo con Addario, Fuster, López y Ludmer.
Saludo del final.
Cierre entre amigos, con unas pizzas y buen vino.
Gracias a Coco y a todos los músicos por regalarnos una noche increíble. Con distintas formaciones y algunas ausencias -no es sencillo juntarlos a todos-, la idea sigue girando por Rosario y alrededores -por caso, anoche se presentaron nuevamente en una versión reducida. Bienvenidas sean sus ganas de tocar.
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